A PORTRAIT OF
DOMESTIC VIOLENCE
SARA LEWKOWICZ
02 September
2012
Millersport,
Ohio, USA
Domestic violence is frequently seen as a private
crime, hidden from view, often excused or obscured from outsiders even by its
victims. Maggie (19) lives in central Ohio, with her children Kayden (4) and
Memphis (2). Her partner of some months, Shane (31), has had struggles with
addiction, and has spent much of his life in prison. One night a violent
argument broke out between them after they had returned home from a bar. Shane
told Maggie she could choose between being beaten in the kitchen, where a friend
was sitting, or going to the basement where they could talk privately. Maggie
refused to be alone with him, and his rage grew more intense. Shane was
arrested after a resident in the house called the police. He later pleaded
guilty to a domestic violence felony and was given a nine-month sentence.
http://www.worldpressphoto.org/awards/2014/contemporary-issues/sara-lewkowicz?gallery=1125526
Esta historia me pareció
relevante pues todos somos podemos llegar a ser víctimas de violencia doméstica
sin importar nuestra clase social, edad, género, religión, o situación
económica. Me parece que es importante hacer notar este problema pues muchas
veces la persona abusada no denuncia a su agresor por miedo a que este dañe a
su familia o se vuelva aún más violento. Además, esta clase de violencia crea
un ambiente familiar dañino que afecta a todos sus miembros, no solo a la
persona que recibe el abuso físico. Muchas veces escuchamos historias en la
televisión o leemos en el periódico acerca de una persona que sufre y vive en
una relación violenta; sin embargo, no imaginamos ni comprendemos realmente el
momento de temor de la persona antes de ser abusada o el arresto (que a veces
no ocurre) del culpable. Estas fotografías nos permiten entrar un poco más en
la vida de esta persona y darnos cuenta, en su totalidad, de las circunstancias
bajo las que crían a sus hijos y se desarrollan.
Me parece que muchos no
sabemos que el “ABUSO” a una persona va desde hostigar a alguien con amenazas o
llamadas constantes hasta negarle a una persona discapacitada el derecho al
cuidado necesario; muchas veces nos quedamos en los golpes o la agresión
verbal. O incluso cuando es evidente la violencia, la víctima se niega a aceptarlo
y, por lo tanto, a buscar ayuda o asistencia profesional.
Fuentes
http://www.idph.state.il.us/about/womenshealth/spfactsheets/dv.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario